30 ago 2011

Nuevos Escritores I

Iniciamos una nueva sección en el blog, como hicimos en LeGrimoire con el "Rincón Creativo" damos paso a que se conozcan relatos, poemas o lo que os parezca bien enviarnos, desde este blog se pretende no sólo reseñar libros publicados sino también abrir una puerta a vuestros aportes..

Para inaugurar la sección contamos con un joven con mucho talento, nos ha pasado una serie de relatos que personalmente me parecen excelentes, creo que aparte de gustos no os dejará indiferentes..



Blood bath

Esta historia quizá no sea la más brutal ni la más vistosa pero me marcó. Me hizo ver la muerte desde cerca y algo así no se olvida. Tenía yo como 6 años, todavía no sabía ni que era un dragón. De pequeño siempre había sido normal: algo bajito, corpulencia normal, algo "seco" de carácter... A decir verdad, no he cambiado mucho desde entonces.

Aunque no se me daban los deportes mal en absoluto, nunca encajé demasiado en la escuela. Siempre había un grupito de chavales que molestaban. Quizá también era porque yo me molestaba... no sé. La cuestión es que "mi mundo" no era un lugar muy bonito para vivir, que digamos. Muchas veces deseé que todo ese dolor desapareciera de una vez.

Mes a mes, los otros chicos parecían en esforzarse en buscar nuevas maneras de hacerme la vida imposible. Golpes, insultos, humillaciones, destrucción de mi material escolar... para ser críos de 6 y 7 años tenían mucha mala idea. Semana a semana, mi odio se iba haciendo más grande y profundo, mis primeros pensamientos sobre sus muertes se hacían realidad en mis deseos y sueños.

Un día de tantos, tuve que ir al baño a mitad de clase. Los lavabos del colegio siempre solían estar algo sucios pero nada que un poco de papel higiénico previo no pueda solucionar. Estaba a medio cagar cuando oí que entraba un chico. Acabé lo que estaba haciendo, me limpié bien y abrí la puerta. Mi sorpresa fue cuando descubrí al chico que había entrado. Javi, uno de los de la panda de es que me hacían la vida imposible día y noche, estaba jugando con el agua de la pica para lavarse las manos.

Lo que siguió no me sorprendió, Javi y yo nos quedamos mirando el uno al otro, sabiendo que lo que pasaba en los lavabos se quedaba en los lavabos. Él introdujo sus 2 manos en la pica y me lanzó parte del agua sucia. Acabé con la camiseta chorreando y empecé a desearle todo el dolor, todo el sufrimiento, a ese estúpido crío. No sé qué demonios pasó en el par de minutos siguientes...

Mi siguiente recuerdo es que volví a clase, oía que caía alguna que otra gota por el camino, pensaba que podía ser de la camisa o de lo que fuera. Piqué a la puerta de mi clase, la profesora me dio permiso y entré. Acto seguido, empecé a escuchar gritos y burlas mientras la señorita seguía sentada en su cómodo sillón de profesor.

Luego ella consiguió reaccionar al tiempo que me empecé a mirar. "¿Qué es esto?" pensé, entonces me clavé de rodillas en el suelo y empecé a gritar. La profesora me hizo callar con sus frenéticas preguntas... no me enteré ni de media. No fue hasta un buen puñado de horas después que empecé a recordar todo.

El informe policial fue casi una película para mí. Puño izquierdo, puño derecho, puño izquierdo y Javi se alza en el aire, salto y patada a las costillas con el chico destrozándose la mandíbula contra el borde de la pica. Le agarro por el cuello de la camisa, abro la puerta de un retrete, lo tomo por la nuca y le empiezo a golpear: 1, 2, 3, 4... fractura craneal. Lo tomo de nuevo y lo llevo a una pared y empiezo a golpearle una vez más: puño izquierdo al hombro, puño derecho al pecho, patada izquierda en la cadera, patada derecha a la espinilla y golpe final a la ya maltrecha cabeza.

Tras recordar esa batería de golpes, me horrorizo ante los agentes mientras me pregunto cómo me envolví de sangre. Finalmente viene a mi mente el recuerdo: abrí a Javi en canal... 3 cortes por su torso dejaron ir tanta sangre que al darme media vuelta e irme me tropecé, manchándome entero.

Esa desgraciada mañana de 1r curso me transformó en lo que soy, un dragón. No sé cómo me transformé pero lo hice y liberé toda mi nueva fuerza y la ira que tenía guardada contra un crío, un inocente que ni mucho menos se merecía lo que hice.
Lavaos las manos antes y después de ir al baño.

Autor: Diego Ruiz


6 comentarios:

  1. Hola. Me gusta la nueva sección... Y a ti Diego, felicidades por el relato, sigue escribiendo que asi empezaron muchos. Besos.

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  2. ¡Increíble! Sé que las personas podemos convertirnos en monstruos cuando nos enojamos y también se que pueden pasar cosas terribles. Esté relato me impresiono mucho, ¡6 años tenía el chico! Un aplauso para Diego, has empezado estupendamente bien esta sección.

    Saludos! :D

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  3. o.O Excelente sección!!! Maravilloso escrito =)

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  4. Un escrito limpio, nítido y desde luego intrigante. Me ha gustado muchísimo. Enhorabuena por la sección. Un excelente idea. Besos.

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  5. Fantástica iniciativa. Enhorabuena por ella.

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  6. Me encanta el blog y esta sección es muy interesante.
    www.relatosdesalamandra.blogspot.com.es

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